viernes, 27 de mayo de 2016

Trabajo nocturno como riesgo Psicosocial

El trabajo nocturno como riesgo psicosocial.

Se define el trabajo en turnos como aquel que se realiza en horarios alternados de la jornada o bien en forma permanente en horarios inusuales como por ejemplo el tema que nos cita en este lugar “Turnos permanentes de noche”. Cerca del 25% de los trabajadores chilenos trabaja en algún sistema de turnos (estadísticas del INE (instituto nacional de estadísticas)).
El trabajador actual vive una vida apresurada y poco acogedora en la cual en ocasiones se debe recurrir a dos trabajos, turnos dobles e incluso triples los cuales son acordados entre empleador y trabajador de manera extraordinaria; si bien nuestro cuerpo puede adaptarse al cambio lentamente y nunca del todo, este esfuerzo tarde o temprano causara varias anomalías en los sistemas de los trabajadores.
En síntesis este tipo de labor puede provocar consecuencias desfavorables sobre el trabajador a través de tres vías:

  •        Alteración de los ritmos circadianos (ritmos biológicos)
  •        Alteración de los patrones socio-temporales (trastornos de la vida familiar y social)
  •        Cambios desfavorables en los estilos vida (aumento de consumo de tabaco, alimentación deficiente o irregular, etc.)

Recomendaciones desde una mirada Psicosocial

Un balance entre la vida privada y el tiempo de trabajo es un factor importante que se pueden incidir en el estrés. Este se relaciona particularmente con largas horas de trabajo, sistemas de turnos irregulares y si se proporcionan o no vacaciones pagadas y descansos.
Algunas medidas prácticas para mejorar la organización del tiempo de trabajo y contribuir el equilibrio entre la vida personal y el trabajo incluyen:

  •        La participación de los trabajadores en el diseño de las horas de trabajo.
  •        Satisfacer las necesidades tanto del trabajo como las de los trabajadores.
  •        Evitar las horas de trabajo excesivamente largas.
  •        Facilitar el cumplimiento de las responsabilidades familiares.
  •        Ajustar las pausas y los tiempos de descanso.

Consideraciones en el diseño del sistema de turnos:

  • En general, se recomienda que:  
  • El periodo de tiempo entre un turno otro sea al menos de 12 horas.
  • Al pasar de un turno de noche a otro se aconseja para una recuperación adecuada descansar 24 horas antes de iniciar el siguiente turno.
  • El inicio de turno de día debe ser cercano a las 8:00 hrs, para mantener una sincronización según el ciclo circadiano o el ciclo del sueño de las personas


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